Desmantelada una red de furtivos que cazaba en las reservas del Boumort

Una operación efectuada por la Guardia Civil, el Cuerpo de Agentes Rurales del Departamento de Medio Ambiente y Vivienda y Mossos d’Esquadra ha permitido desmantelar una red de furtivos que actuaba en Lleida, las Terres de l’Ebre, Ciudad Real, Jaén y Córdoba. Con la llamada operación Cazorla, que ha dirigido un juez de la misma población andaluza, han sido detenidas siete personas y han sido imputadas cuatro más por delitos relacionados con asociación ilícita, tenencia ilícita de armas y delitos contra la flora y la fauna. Los agentes han decomisado en los detenidos armas, trofeos y animales congelados, entre otros efectos.

Las investigaciones empezaron en junio del año pasado, cuando agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), Agentes Rurales del Departamento de Medio Ambiente y Vivienda y Mossos d’Esquadra constataron la existencia de un grupo organizado especializado en la caza furtiva de especies cinegéticas, no cinegéticas y en peligro de extinción. Según la nota del Govern, desarrollaban su actividad en la Reserva de Caza de los Puertos de Tortosa y Beseit.Como resultado de las investigaciones, se pudo identificar al jefe de la red, quien establecía contactos con los clientes y contaba con la colaboración de diversas personas para efectuar la vigilancia, el transporte y el suministro de armas. Posteriormente, se averiguó que la organización hacía de manera continuada acciones de caza furtiva en espacios protegidos de diferentes puntos del Estado, principalmente en épocas de veda y en espacios protegidos, donde mataban ejemplares de especias de gran valor cinegético como la cabra salvaje o el mufló, hechos que han producido daños graves al patrimonio de las zonas naturales donde llevaban a cabo las cacerías.La red desmantelada actuaba en los Puertos y también en la Reserva de Caza de Boumort, y en el Parque Natural de Cazorla, Segura y laso Villas (Jaén), en el Parque Natural de la Serra de Andújar y en diferentes zonas privadas de caza de Ciudad Real y Córdoba. Las mayoría de las cacerías se llevaban a cabo durante la noche.

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