Islas Culumbretas el encanto de un archipiélago con una identidad singular


La configuración aislada de las islas Columbretes, que cumplen este año 20 años como parque natural, ha favorecido que se asienten en ellas nuevas y singulares especies


Un parque natural con historia. Nada menos que dos décadas de protección, de lucha por la conservación de la flora y fauna de una de las zonas más ricas de la Comunitat Valenciana. Cuidado, respeto y un lugar único a tan sólo 30 millas de la costa de Castellón. Un paraje considerado como uno de los archipiélagos volcánicos de mayor interés ecológico de todo el mar Mediterráneo.Fue hace 20 años, exactamente el día 25 de enero de 1988, cuando el Consell otorgó por decreto la denominación de parque natural al ecosistema de las islas Columbretes, que gracias a ello, hoy en día aún cuentan con la protección y el amparo de la Ley 15/1975 de Espacios Naturales Protegidos, de ámbito estatal, derogada y sustituida por la 4/1989 de Conservación de Espacios Naturales y de la Flora y Fauna Silvestres. Años después, en 1994, el texto 11/1994 de Espacios Naturales Protegidos de la Comunitat Valenciana, que confiere al ecosistema la figura que lo protege actualmente.Y es que se trata de un archipiélago que destaca sobre otros enclaves de la península por su interés geológico y sus colonias de aves marinas. Entre ellas, la gaviota de Audouin, la pardela cenicienta, el halcón de Eleonor y el cormorán moñudo, todas en peligro de extinción en el Mediterráneo Occidental, y que se encuentran en estas islas por ser el único punto de nidificación de la Comunitat.La presencia de estas tres especies en la zona es de gran importancia, del mismo modo, que lo son otros animales terrestres como los artrópodos, con diez insectos endémicos, o la especie más importante que habita en la reserva: la lagartija de Columbretes, en honor al único ecosistema en el que reside.La gran riqueza del lugar, reside en parte, en la suma de fauna y flora terrestre y marina. Es, precisamente, el fondo marino el que está repleto de escollos, bancos y bajos que sirven de refugio a muchas especies. Las islas, también son el enclave perfecto por sus condiciones para la supervivencia de la tortuga boba, en peligro de extinción, por lo que entre otras actividades la Conselleria de Medio Ambiente realiza diferentes actuaciones y reintroducciones en la zona. Riqueza naturalEl pequeño archipiélago cuenta con más de cincuenta kilómetros de la costa de Castellón, de los que tan sólo 15 hectáreas están emergidas, y está formado por cuatro islotes que reciben el nombre l'illa Grossa, la Ferrera, la Foradada y el Carallot. El punto más alto del conjunto, el monte Colibre, se encuentra a 67 metros en la parte norte de l'illa Grossa.Las Columbretes, de origen volcánico, aislan a especies animales y vegetales en su pequeña extensión y las somete a condiciones ambientales especialmente características y duras, que hacen de ellas un ecosistema único y frágil.Además de su valor natural, este enclave posee una gran belleza por su grado de conservación, aunque en ocasiones se ha visto amenazado por actuaciones humanas. Una degradación de la zona que ha llegado a unos límites que hicieron manifiesta su necesaria protección. Organizaciones ecologistas, como Greenpeace, expresaron su voluntad de que el archipiélago con sus islotes fuesen declarados Reserva Integral de Interés Científico. Su importancia reside en su papel como zona de paso y de descanso de las aves migratorias que las utilizan como un puente entre las marismas del sur de Francia y la Albufera de Valencia en sus dos migraciones anuales, ciclos que se desarrollan en primavera y otoño. Allí descansan y anidan aves en peligro de extinción y residen otras especies singulares como la lagartija propia de las islas, escorpiones e insectos que se han adaptado a las condiciones especificas de las islas.La vegetación del archipiélago es escasa, y se encuentran plantas de origen peninsular, que se han adaptado a la dureza y peculiaridades de la zona, dando lugar a nuevas subespecies, que por tanto, sólo subsisten en el lugar.El reducido espacio emergido de les Columbretes se caracteriza por su terreno árido, un escaso suelo, tempestades, grandes insolaciones y la elevada salinidad de las plantas. Entre estas últimas, destaca el mastuerzo marítimo y la alfalfa arbórea adaptadas a las duras condiciones de la zona, y especies tan interesantes como la sosa fina, la zanahoria marina, el hinojo marino, la malva, la cambronera y el oroval. Todas repartidas en dos microrreservas de flora, una en la isla de la Ferrera y la otra en la Foradada. Las legendarias culebras que dan nombre a las islas desaparecieron hace más de un siglo, pero gracias a que han surgido nuevas subespecies en la zona, el archipiélago también cuenta con 10 especies de insectos exclusivas. Todo ello, sumado a su importancia como enclave para aves, ha llevado a su nombramiento como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).No hay que olvidar tampoco la riqueza y diversidad de sus corales, tortugas y peces, que se han visto amenazadas y en continua degradación por el turismo en la zona. Greenpeace desde hace tiempo denuncia que los yates de particulares y la prolifera realización de excursiones, sobre todo en verano, vulneran y corrompen la tranquilidad que aves y demás especies necesitan para reproducirse.También se ha registrado en la zona "el uso de escafandras para la pesca deportiva o profesional sin control que merma la calidad de sus fondos marinos". Toda una serie de circunstancias que se desencadenaron tras la construcción del faro en la zona y su consecuente actividad.

Osos panda también afectados por el terremoto de China

El devastador terremoto del pasado 12 de mayo en el suroeste de China y las continuas réplicas han obligado a los trabajadores de silvicultura a dejar de hacer rondas de vigilancia en la mayor reserva natural de osos panda del país, situada en la zona fronteriza entre las provincias chinas de Sichuan (suroeste) y Gansu (norte).
"El terremoto y las miles de réplicas han causado corrimientos de tierra y bloqueado carreteras de montaña", dijo Huang Huali, subdirector de la Administración de la Reserva Natural de Baishuijiang.
Huang y sus colegas también se han visto obligados a detener el censo anual de osos panda que realizaban en la zona montañosa de 220.000 hectáreas. "No hemos podido entrar en el centro de los bosques para saber si los pandas están bien", dijo Huang.
Poco después del temblor, algunos trabajadores se aventuraron en la montaña. "Entonces no se había encontrado ningún oso muerto, pero pedimos a los trabajadores que regresaran debido a las continuas réplicas".
Según las estadísticas del último censo de pandas, finalizado en 2001, un total de 103 ejemplares viven en Baishuijiang, la mayor de las 55 reservas naturales de osos panda de China y situada a 100 kilómetros de los distritos de Sichuan que resultaron más afectados por el terremoto.
Huang dijo que el hábitat de los pandas está cubierto por bosques vírgenes, que podrían constituir un lugar idóneo para protegerse de desastres geológicos. También agregó que "los animales salvajes suelen estar más alerta y responden con mayor rapidez ante los desastres que los seres humanos. Esperamos que todos los pandas gigantes estén a salvo".
Dijo que su administración está dispuesta a verificar la situación de los pandas gigantes en cuanto resulte seguro.
Se teme que el seísmo podría haber destruido el alimento favorito de los osos panda, el bambú, y alterado el ciclo de reproducción y apareamiento de estos animales, dijo Huang.
"La primavera es la temporada de apareamiento de las pandas, pero si están asustados, podrían mostrar todavía un menor interés por el apareamiento", explicó Huang, quien añadió que estos animales suelen tener poco interés por la reproducción, razón que explica en parte porque son una especie tan escasa.
En la actualidad, hay 1.590 pandas salvajes en China, la mayoría en Sichuan y las provincias noroccidentales de Shaanxi y Gansu, mientras otros 180 ejemplares han sido criados en cautividad.
La reserva natural de Wolong, la más conocida y situada en Sichuan es el hogar de 86 de estos animales. Como consecuencia del terremoto, seis de ellos desaparecieron, aunque cinco ya han sido localizados.
Ocho pandas de Wolong fueron enviados al zoo de Beijing la semana pasada por avión, mientras otros seis fueron trasladados a Ya'an, otra base de cría que resultó menos afectada por el seísmo.
En la actualidad, los ocho osos panda que tiene Ya'an, cerca de la ciudad de Chengdu, capital de Sichuan, y los más de 60 ejemplares en el centro de cría de Chengdu, están sanos y salvos tras el terremoto.

Quieren exterminar a tiburones

Está prohibido entrar al mar mientras se determina que pasó el peligro; ambientalistas rechazan caza

ZIHUATANEJO, Gro.— Pescadores y buzos de la región exigieron a autoridades federales, estatales y municipales, así como a grupos ambientalistas, que autoricen el aniquilamiento masivo de tiburones, ante el riesgo que los ataques de éstos representan para el desarrollo de sus actividades.
“No pasará nada si se acaban los escualos, mientras que éstos sí causan alarma y sicosis entre propios y extraños”, afirmó Benjamín Lorenzana Basurto, presidente de la Sociedad Cooperativa de Producción Pesquera y Buzos Los Pulpos, durante la reunión en la que el director del Instituto de Investigación de Ataques de Tiburón, con sede en Florida, Estados Unidos, George Burguess, iba a presentar ayer un dictamen preliminar del trabajo de campo que realiza desde el martes pasado para investigar los recientes ataques de escualos a surfistas.
El director de Turismo del ayuntamiento de Zihuatanejo, Guillermo Catalán, explicó la ausencia del especialista: “Anda todavía realizando investigaciones en el mar”.
En esa reunión, la confrontación de intereses económicos contra la preservación de la vida marina salieron a relucir entre autoridades, prestadores de servicios turísticos, grupos de protección marina, pescadores y buzos.
“¿Y nosotros, los pescadores?”
Lorenzana Basurto, molesto, se paró de su asiento cuando concluía la junta, para decir que sólo se había hecho patente el interés de los prestadores de servicios turísticos y los tres niveles de gobierno por evitar que la difusión de estos ataques provoquen una caída a la denominada “industria sin chimeneas” en la zona.
“Pero no han dicho ¿qué va a pasar con nosotros que vivimos del buceo y la captura de especies marinas?. Si se nos prohíbe meternos al mar porque hay tiburones, ¿cómo le vamos a hacer para mantener a nuestras familias?. Somos cientos de personas que dependemos de esta actividad, la gente viene a bañarse y a comer, y somos los encargados de sacar lo que ellos degustan”, enumeró el representante pesquero.
“No es justo que por querer preservar esos animales, realmente dañinos, a nosotros se nos prohíba ejercer esa actividad”, insistió, luego de escuchar las recomendaciones del director de Turismo Municipal a nombre del Comité de Emergencia formado con motivo de los recientes ataques de tiburones.
Aquéllas consisten en que los habitantes de la zona, incluidos los pescadores, y los turistas, se abstengan por un tiempo de meterse a nadar o bucear, hasta que los especialistas determinen que pasó el peligro.
Sin embargo, el dirigente volvió a la carga al decir que no tomaran a mal sus palabras, pero “ustedes son funcionarios, sin necesidad de meterse al mar a ganar el sustento diario de sus familias. Si de verdad quieren a los tiburones, pues agárrenlos y pónganlos en una pecera, porque no es cierto que con colocar dos o tres botes los vamos a ahuyentar; los animales están ahí en su hábitat y ya probaron la carne humana y lo van a seguir haciendo.
“Ya se perdieron dos vidas y ellos (escualos) siguen aquí. Anteayer andaban en Las Escolleras, no tienen territorio límite; además, ahora andan a 50 centímetros de hondo, ya están ‘cebados’. ¿Qué pasaría si se llegan a comer a otra persona, quién será el responsable de esa vida?”.
En la reunión, la subsecretaria estatal de Protección Civil, Nubia Sáyago, explicó que junto con la Federación y municipio, se toman acciones preventivas para evitar más ataques de tiburones, mientras el especialista de la Florida emite sus conclusiones.
Dijo que entre junio y diciembre próximos habrá distintas actividades para atraer al turismo y con ello contrarrestar la publicidad o el impacto negativo de estos ataques.
Aída Navarro, coordinadora de Conservación de Vida Silvestre, con oficinas en Tijuana y matriz en Imperial Beach, California, se opuso a la captura y matanza indiscriminada de escualos, pues se violaría la Norma Oficial Mexicana 029 y 059, dedicadas a especies en peligro de extinción como tiburón blanco, ballena y peregrino.

Parques naturales Castilla-La Mancha


La comunidad autónoma se encuentra situada en el centro de la Península Ibérica, ocupando la mayor parte de la Submeseta sur, denominación que se da a la extensa llanura que conforma la parte sur de la Meseta central. Se encuentra encuadrada al sur del Sistema Central división natural con la Submeseta norte y con Castilla y León. Pese a esto no faltan los paisajes montañosos como el del ya nombrado Sistema central (al norte), el Sistema Ibérico (al nordeste) o Sierra Morena y los Montes de Toledo, al sur.

Es la tercera región española más extensa con una superficie de 79.463 km2, lo que representa el 15,7% del territorio nacional.


Orografía

En la región se distinguen claramente dos tipos de relieve. Por una parte, la Meseta, una gran llanura uniforme con poco relieve. Dentro de esa uniformidad, el relieve más destacable es el formado por los Montes de Toledo, con alturas como Las Villuercas (1.601 m) y Rocigalgo (1.447 m). Está dividida entre los valles del río Tajo y del Guadiana

Por otra parte, la zona más montañosa, que rodea la Meseta y sirve de límite natural de la comunidad. En el norte de la provincia de Guadalajara, limitando con Madrid y Segovia, se encuentra un conjunto montañoso, perteneciente al Sistema Central, del que destacan las sierras de Pela, Ayllón, Somosierra, Barahona y Ministra, y en el cual nacen los ríos Jarama, Cañamares y Henares. El Sistema Central penetra también en la región por la provincia de Toledo, en lo que es el sector meridional de la Sierra de Gredos, conocido como Sierra de San Vicente, que se encuentra delimitada al norte por el río Tiétar y al sur por el Alberche y el Tajo.

Al sur de dicho sistema se sitúan los Montes de Toledo, que atraviesan la región de oeste a este, marcando la divisoria entre el Tajo y el Guadiana, formando parte de la vertiente meridional de la cuenca del primero y de la septentrional del segundo.

Al noroeste se encuentra el Sistema Ibérico, donde existe una importante acción fluvial y sobre todo cárstica, que ha dado lugar a parajes como la Ciudad Encantada, los Callejones de Las Majadas o las Hoces del Cabriel.

En el suroeste se encuentra la cordillera de Sierra Morena, que constituye el reborde sur de la Meseta Central y que sirve límite con Andalucía. En ella destacan dentro de la región Sierra Madrona, Sierra de Alcudia y Sierra de San Andrés. En el otro extremo sur de la Comunidad se encuentra la Sierra de Alcaraz y la Sierra del Segura que forman parte del sistema Bético.

Hidrografía

El territorio castellano-manchego está dividido en cinco cuencas hidrográficas principales, Tajo, Guadiana, y Guadalquivir que vierten sus aguas al Océano Atlántico y Júcar y Segura, que vierten al Mediterráneo. El Tajo abastece a una población total de 587.184 habitantes siendo la extensión de su cuenca de 26.699 km2.[5] Abarca la totalidad de la provincia de Guadalajara y la mayor parte de la provincia de Toledo, incluida las dos mayores ciudades de la provincia, la capital, Toledo, y Talavera de la Reina.

La cuenca hidrográfica del Guadiana tiene una extensión de 26.646 km2, lo que supone el 37% del total del río, y atiende a una población de 583.259 habitantes.[6] Abarca el sur de la provincia de Toledo, casi la totalidad de la provincia de Ciudad Real (exceptuando la parte sur), el suroeste de la provincia de Cuenca y el noroeste de la provincia de Albacete. Por su parte, la cuenca del Guadalquivir ocupa un 5.17%[7] del territorio regional lo que supone una extensión de 4.100 km2 y abastece a poblaciones tan importantes como Puertollano.[8] Se encuentra al sur de las provincias de Ciudad Real y Albacete.

En cuanto al Júcar, su cuenca abastece, a fecha de 2006, a 397.000 personas y abarca una extensión de 15.737 km2 lo que supone el 19,86% del territorio regional y el 36,61% del total de la cuenca.[9] Abarca el este de las provincias de Cuenca y de Albacete, incluyendo ambas capitales. Por último, la cuenca del Segura abastece a un total de 34 municipios albaceteños, situados al sureste de la provincia, y se extiende por un total de 4.713 km2.[10]





Parque nacional de Cabañeros


Parque nacional Las Tablas de Daimiel


Parque natural Alto Tajo


Parque natural Barranco del río Dulce


Parque natural Hayedo de Tejera Negra


Parque natural Lagunas de Riudera


Parque natural los Calares del río Mundo y de la Sima


Parque natural Serrania de Cuenca

El pterosaurio

El pterosaurio que no voló


Con el tamaño de una jirafa y, probablemente, un peso equivalente el pterosaurio gigante pasa por ser con sus diez metros en envergadura alar el ser vivo más grande que jamás ha volado sobre la Tierra. O al menos eso piensan los paleontólogos. Aunque ahora, al parecer, no lo tienen tan claro y puede que ni siquiera volasen.
El Pterosaurus azhdarchidae o pterosaurio gigante pobló buena parte del mundo a finales del Cretácico, y según han estudiado investigadores de la universidad británica de Portsmouth su cuerpo estaba mejor adaptado para desplazarse por el suelo que para volar.
Del Triásico al Cretácico
Desde la década de 1970, cuando empezaron a ser mejor conocidos, se pensaba que todos los pterosaurios -presentes en las eras triásica, jurásica y cretácica, hace entre 230 y 65 millones de años- eran dinosaurios voladores. La investigación publicada por los paleontólogos Mark Witton y Darren Naish en el último número de la revista «PLOS One», sin embargo, argumenta que los «azhdárchidos» o pterosaurios gigantes preferían caminar a volar y su morfología estaba mejor adaptada a la vida en tierra. A esta conclusión han llegado tras analizar anatomía, sus huellas y la distribución de sus fósiles conocidos hasta la fecha, que han sido siempre localizados en sedimentos tierra adentro.
Tanto sus cuellos, demasiado rígidos para volar, como sus patas almohadilladas, o sus mandíbulas largas, débiles y desprovistas de dientes «hubieran supuesto un problema para otro modo de vida que no fuera terrestre», explican los investigadores.
Sus análogos más cercanos en el mundo moderno no serían pues las gaviotas, los albatros o cualquier otra ave marina, sino aves que se alimentan en tierra como los cálaos o las cigüeñas. Sus miembros largos y la forma también alargada de su cráneo, que podía medir más de dos metros, los hacían más aptos que al resto de los pterosaurios para capturar animales o alimentarse en el suelo, les bastaba con bajar sus picos desdentados. Sus extremidades no eran adecuadas para vadear lagos o ríos, ni para nadar si descendían sobre el agua. «Las huellas de sus pisadas corresponden a las de un animal terrestre», concluyen los paleontólogos

Tiburones pelágicos amenazadas de extinción

11 especies de tiburones pelágicos amenazadas de extinción por el consumo de la aleta


Un informe presentado la semana pasada en la reunión del Convenio sobre la Diversidad Biológica de las Naciones Unidas celebrada en Bonn, Alemania, reveló que un total de 11 especies de tiburones pelágicos están hoy día amenazadas de extinción, subrayando la urgencia para que se establezca medidas responsables de protección para estos animales tan vulnerables. Oceana, la organización internacional dedicada a la protección de los océanos, exige a la Unión Europea el apoyo y la aprobación de un Plan de Acción sólido y basado en la ciencia para los tiburones.
Este año se añadirán otras siete especies de tiburones pelágicos, o habitantes del océano abierto, a la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), llegando el total a 21 especies de tiburones. Estas especies oceánicas han sido consideradas habitualmente especies migratorias muy poderosas, resistentes a las presiones de la pesca. Sin embargo, la pesca dirigida y la captura accidental amenazan en la actualidad a 11 de estas especies, incluyendo el marrajo, el tiburón zorro y el tiburón sedoso. Estos tiburones pelágicos se unen a las especies costeras y de alta mar ya conocidas por ser especialmente vulnerables a la sobreexplotación pesquera.
Los tiburones oceánicos, que habitualmente eran capturados de forma accidental por los barcos dedicados al atún y pez espada, son hoy en día perseguidos oficialmente y codiciados a gran escala debido a sus aletas. Las aletas se exportan a Asia para utilizarlas en la sopa de aleta de tiburón, un plato frecuentemente servido como manjar en bodas, comidas de negocios y otros eventos y celebraciones. Esta demanda frecuentemente lleva al aleteo de los tiburones, una práctica cruel y derrochadora en la que se cortan las aletas del tiburón vivo y el resto del cuerpo se lanza al mar para esperar una muerte segura. Con el corte de las aletas solamente se utiliza entre un 2 y un 5% del animal completo, y es ilegal en muchas partes del mundo.
El crecimiento de la clase media en China está incrementando la demanda de aletas de tiburón a niveles récord, y la Unión Europea es un importante exportador de aletas para estos mercados. En 2005, la Unión Europea exportó 2.273 toneladas de aletas al mercado de Hong Kong, uno de los mayores del mundo para este producto. España lidera la participación europea en Hong Kong, y los puertos de Vigo, en Galicia, y Las Palmas, en las Islas Canarias, son los centros europeos para el comercio de aletas.
Una de las principales especies capturadas por los barcos de la Unión Europea por sus aletas es el marrajo dientuso, que este año va a ser añadido a la Lista Roja de Especies Amenazadas. En 2006, España y Portugal capturaron más de 3.000 toneladas de esta especie. De hecho, de acuerdo con los análisis realizados por Oceana sobre estadísticas de pesquerías, los barcos de España y Portugal y de otros países europeos capturaron más de 10.000 toneladas de tiburones y rayas amenazadas. Otras especies que han sido objeto de pesca indiscriminada, incluyendo la tintorera, no se han incluido todavía en la Lista Roja pero han sufrido un grave declive en la última década.
Oceana ha vigilado muy de cerca el desarrollo del Plan de Acción de la Unión Europea para la Conservación y Gestión de Tiburones. En diciembre del año pasado, la Comisión Europea abrió un proceso de consulta con las partes interesadas en este documento, y Oceana remitió oficialmente sus comentarios, su postura y sus recomendaciones para suplementar las carencias de información y mejorar las medidas de conservación propuestas.
Oceana reitera que el Plan de Acción de la UE debería incluir medidas para:


-Establecer unas cuotas basadas en la ciencia y que sean preventivas para la pesca de todas las especies comercializadas.


-Reforzar el reglamento sobre el aleteo de tiburón de la Unión Europea solicitando que todos los tiburones sean desembarcados con sus aletas sin cortar.


-Introducir límites específicos por pesquería para la captura accidental de tiburones y una prohibición completa sobre los descartes, con la excepción de que los tiburones con posibilidad de sobrevivir sean arrojados de nuevo al agua.


-Añadir las especies de tiburones amenazadas y sus hábitat a los convenios de conservación regionales e internacionales.


-Reforzar la monitorización y el control de las pesquerías de tiburones para los barcos de la Unión Europea dondequiera que operen, con sanciones por incumplimiento.


-Mejorar los análisis de datos para las pesquerías de tiburones, comercio por especie y producto y biología de los tiburones.


La Unión Europea juega un papel importante en la pesca y el comercio internacional de tiburones y es responsable de garantizar el futuro de estos animales. El Plan de Acción de la Unión Europea está muy atrasado, pero representa una oportunidad para que la UE se convierta en líder en la conservación y pesca de tiburones.

Parques naturales Cantabria




Cantabria es una región de carácter montañoso y costero y con un importante patrimonio natural. Su enérgico relieve hace que el 40% de su superficie se sitúe por encima de los 700 metros de altitud y un tercio de este con pendientes de más del 30% de inclinación.[1] En ella se distinguen dos áreas morfológicamente bien diferenciadas:


La Marina. Una franja costera de valles bajos, amplios y de formas suaves de unos 10 km de ancho cuya altitud no suele superar los 500 msnm y que limita con el mar por medio de una línea de rasas litorales, configurando abruptos acantilados que son rotos por la aparición de desembocaduras de ríos generando rías y playas. En el litoral de la región destaca la Bahía de Santander. Por el sur la marina limita con la montaña.



La Montaña. Es una larga barrera de montañas abruptas paralela al mar que componen parte de la cordillera Cantábrica. En su mayoría de roca calcárea afectada por fenómenos kársticos y que cubren la mayor parte de Cantabria. Forman valles profundos en disposición norte-sur con fuertes pendientes horadadas por ríos de carácter torrencial, de gran poder erosivo y cortos por la poca distancia entre su nacimiento y su desembocadura. Los valles configuran diferentes comarcas naturales de la región bien delimitadas físicamente por los cordales montañosos: Liébana, Nansa, Saja, Besaya, Pas-Pisueña, Miera, Asón-Gándara, Campoo. A la montaña pertenece la sierra del Escudo, cordón montañoso de entre 600 y 1.000 msnm y que a lo largo de la zona occidental de Cantabria sigue paralela a unos 15 o 20 km de la costa. Montañas más altas nos encontramos a medida que nos desplazamos al sur, con una alineación de crestas que limitan los valles y las cuencas hidrográficas de los ríos Ebro, Duero y aquellos que desembocan en el Mar Cantábrico. Por lo general superan los 1.500 metros de altitud, desde el puerto de San Glorio en el oeste hasta el de Los Tornos en la parte oriental: Peña Labra, puerto de Sejos, puerto del Escudo, Castro Valnera y La Sía. También destacan los grandes macizos calcáreos de los Picos de Europa en la zona sur occidental de la región, cuyas cumbres sobrepasan la mayoría 2.500 metros y donde es amplia la presencia del modelado glaciar en su morfología.
Campoo y los valles del sur. La otra comarca que se diferencia es Campoo, en el extremo sur de Cantabria. Con un clima más continentalizado, presenta un desarrollo óptimo de masas forestales de rebollo (quercus pyrenaica) y que se encuentra en un periodo expansivo por el abandono de las tierras agrarias. Además, también existen grandes repoblaciones de coníferas (pinus sylvestris) en las suaves pendientes de la comarca.


SUS PARQUES






El camaleón (Nuevos descubrimientos)

Nuevos descubrimientos acerca del animal irracional que mejor sabe disfrazarse disimulando su presencia y confundiéndose con el paisaje. El camaleón, reptil saurio que se alimenta de insectos que caza con su lengua larga y pegajosa y que posee la facultad de cambiar de color según le convenga o le aconsejen las condiciones ambientales, es más camaleónico aún de lo que se suponía. Un grupo de científicos australianos ha publicado en la revista británica Biology Letters los resultados de un estudio que arroja la evidencia de que el camaleón no sólo se adapta al color de fondo del escenario, sino también a las facultades visuales de sus predadores.Los susodichos científicos capturaron 16 camaleones enanos, de la especie Bradypodion taeniabronchum, una de las ochenta especies existentes, pues que el camaleón no es uno sino muchos y diversos (y aquí que cada uno lea lo que quiera). La mitad eran machos y la otra mitad hembras (el disimulo no hace distingo de géneros). Fueron enfrentados a dos grandes predadoras, una era la conocida como arpía fiscal (que cada cual siga interpretando lo que quiera), la otra era una serpiente arbórea y, por supuesto, venenosa. Valiéndose de espectómetros, midieron los científicos australianos las modificaciones experimentadas en el color de sus camaleones antes y después de que ellos hubiesen reparado en la presencia de sus predadores, obteniendo variadas enseñanzas. No es la menos importante que, cuanto más claro ve su predador, mejor se confunde el camaleón con el paisaje; y también que, ante la serpiente el camaleón se vuelve generalmente más pálido que ante el pajarraco. Será que le impone más.Se trata de la primera observación llevada a cabo en el mundo sobre la adaptación de un mecanismo de camuflaje animal a unos predadores específicos. Importante descubrimiento, aunque insuficiente -pensarán los malpensados- si pretendemos explicarnos la compleja trama de disfraces, camuflajes y disimulos con que nos obsequia en estos días la vida nacional opositora. Pero esto es harina de otro costal. El político, animal racional de lengua larga y pegajosa y con más de 80 especies diversas, merecería ser objeto de estudios biológicos permanentes.

Calamar de seis metros y 200 kilos causa alarma en Australia


Un grupo de pescadores australianos quedó consternado al encontrar un calamar de seis metros y 200 kilos, nadando en las profundidades marinas.
Con gran esfuerzo los hombres de mar lograron capturar al raro espécimen, que luego fue conducido al museo de Melbourne, al suroeste de Australia, donde será estudiado por científicos marinos.
El cefalópodo, que fue pescado anoche, se conserva almacenaos en un frigorífico industrial de la ciudad de Pórtland. Hasta el momento no se ha decidido si el animal será usado para fines científicos o exhibición del museo.
Hasta el momento, el calamar más grande del mundo fue encontrado en aguas antárticas. Cuando fue capturado medía 10 metros y pesada 492 kilos.

Los océanos están prácticamente saturados por sobreexplotación

Los océanos están prácticamente saturados por la sobreexplotación, con el 75 por ciento de reservas de peces que están explotadas totalmente o en exceso, que han sido diezmadas o están en proceso de recuperación, según datos citados en un informe presentado hoy por la organización Oceana.
Según sus expertos, si se combinan esos datos con los de reservas de especies cuya situación se desconoce o que están en fuerte riesgo, sólo el 17 por ciento de las especies comerciales pueden experimentar algún tipo de incremento en su captura, señaló Efe.
Las evaluaciones han identificado las áreas donde las reservas de peces no podrían soportar un aumento de la pesca, las que están principalmente en el Océano Índico occidental, y el noreste, oriente central y occidente central del Atlántico.
"Las flotas de pesca no pueden seguir esperando encontrar nuevas fuentes de peces", dijo a Efe la directora de campaña en Oceana, Courtney Sakai, quien agregó que si los países quieren recursos pesqueros abundantes y saludables, deben mejorar su gestión y reducir las presiones políticas y económicas que llevan a la sobrepesca.
Uno de los aspectos que más preocupa a esa organización es el desconocimiento de la situación de casi una cuarta parte de las reservas mundiales de peces, lo que se debe principalmente a que los países con derechos sobre esas áreas no han facilitado esa información a los organismos internacionales competentes.
En el caso de las costa Atlántica de Sudamérica, se desconoce el estado de hasta el 50 por ciento de las reservas, recalcó Sakai.
Mencionó que en las zonas con un rápido desarrollo de la industria pesquera, como son los océanos del hemisferio Sur, la zona occidental del Océano Índico y el sur del Atlántico, esa situación es particularmente alarmante y el desconocimiento de las reservas de recursos marinos se ubica entre el 50 y el 75 por ciento.
Esta situación se agrava por los subsidios que recibe la industria pesquera, que se elevan a 20.000 millones de dólares anuales a nivel mundial, un importe que representa el 25 por ciento del valor que genera ese sector, según el informe de Oceana.
Como consecuencia, las flotas pesqueras están sobredimensionadas frente a las necesidades reales, lo que empuja a la sobrepesca y al agotamiento de los recursos del mar.
Según Oceana, son la Unión Europea, China, Japón y Corea del Sur son los que entregan los mayores subsidios.
Los subsidios a la pesca industrial es uno de los temas que se negocian en la Organización Mundial del Comercio (OMC), como parte de la Ronda de Desarrollo de Doha, con el propósito de lograr una reducción y control de esas millonarias ayudas.
Sin embargo, Sakai reconoció que esa negociación está supeditada a lo que ocurra en las áreas de agricultura, acceso a mercados para productos industriales y servicios, consideradas claves en la Ronda de Doha.
Se espera que una nueva semana de negociaciones sobre el tema pesquero tenga lugar la tercera semana de junio en la OMC.

Parques naturales Canarias


Relieve


Canarias es un archipiélago volcánico muy reciente, con apenas 30 millones de años de antigüedad. Sus grandes edificios volcánicos se apoyan sobre grandes bloques de la corteza oceánica, y en la zona de contacto con la corteza continental africana. La disposición de las islas refleja la red de fallas presentes en la corteza oceánica.
La historia geológica de las islas es muy compleja. Encontramos varias fases de coladas de lavas que dan un típico relieve volcánico. Durante las grandes glaciaciones, las Canarias tuvieron un clima más árido que favoreció la erosión y la aparición de derrubios en las laderas y los barrancos.
Las costas son las más expuestas al ímpetu de la erosión, debido a la actividad marina. Hay muy pocas zonas de acumulación, lo que supone la existencia de muy pocas playas naturales. Predominan los grandes acantilados. Es destacable que Canarias es la región española con mayor longitud de costas: 1.583 km.[30]
Los barrancos son muy característicos de las islas Canarias: se trata del cauce esporádico por donde se dirigen las aguas corrientes presentes en las islas. Su recorrido es corto, y generalmente tienen un perfil rectilíneo muy marcado. Su cauce está tapizado de derrubios arrastrados por las aguas.


Clima

El clima es subtropical oceánico, con temperaturas mitigadas todo el año por el mar y en verano por los vientos alisios. Nos encontramos con variaciones muy importantes en cuanto al régimen de precipitaciones. En algunas zonas de la Isla de La Palma, por ejemplo, las precipitaciones anuales llegan a superar los 1.200 litros. En las islas orientales las precipitaciones son más escasas que en las occidentales; así Fuerteventura y Lanzarote se caracterizan por un clima árido semidesértico. La escasez de lluvia ha llevado a la instalación de desaladoras para abastecer zonas urbanas, como en Las Palmas de Gran Canaria o Santa Cruz de Tenerife. De hecho, la primera planta desaladora de España se instaló en la isla de Lanzarote en 1964, y en la actualidad esta isla y Fuerteventura se abastecen casi en su totalidad de agua de mar desalada[cita requerida]. La porosidad del terreno dada su naturaleza volcánica, dificulta el aprovechamiento del agua de la lluvia en presas y embalses, si bien estas tienen una cierta importancia en Gran Canaria y La Gomera. En las islas occidentales se lleva a cabo un aprovechamiento de los acuíferos subterráneos a través de las galerías, a excepción de la Isla de El Hierro, donde son más importantes los pozos y aljibes. Una característica de algunos lugares de las islas es la presencia de montañas cerca de la costa que provocan que las masas de aire se condensen, dando lugar al fenómeno conocido como mar de nubes, y por tanto, el beneficio de la vegetación de la zona debido a la humedad. Sin embargo, debido a los microclimas existentes en una misma isla, podemos encontrar zonas donde aparecen boques húmedos y otras zonas donde la aridez es la característica principal.
Los vientos suelen soplar con mayor frecuencia del noreste, vientos que si bien no suelen dejar precipitaciones, si reportan humedad a las zonas orientadas hacia ese lugar, formándose el ya citado mar de nubes en zonas medias y altas. Los vientos del levante, siroco, suelen ir acompañado de calima, es decir, polvo en suspensión procedente del desierto del Sáhara, alcanzando a veces una gran densidad.
Las islas carecen de ríos aunque los barrancos son numerosos y las aguas discurren rápidamente desde las zonas altas hasta las costas. A pesar de ello existen algunas corrientes continuas de agua en La Palma, La Gomera y Tenerife.


Vegetación


La vegetación varía según la orientación y la altura. En las vertientes orientadas hacia el norte y noroeste hay plantas mesófilas y las orientadas al sur y suroeste hay plantas xerófilas. Cuentan con una rica vegetación endémicas y una gran variedad de aves e invertebrados.
Podemos identificar los siguientes pisos de vegetación, si bien no se hallan presentes en todas las islas:
Vegetación xerófila
Cardonal - tabaibal
Zona termófila (palmera, drago, sabina, etc.)
Laurisilva y faya-brezal (en las zonas orientadas al norte y este)
Pinar
Retamas


SUS PARQUES

Parques naturales Baleares



Paleogeografía

Gimnesias y Pitiusas han tenido una historia geográfica diferente. Durante las glaciaciones del Cuaternario, debido a la acumulación de agua en forma de hielo en los casquetes polares y en las grandes sierras, mares y océanos bajaron de nivel. Esto provocó que se unieran Menorca y Mallorca por un lado e Ibiza y Formentera por el otro. Todas las faunas y floras se mezclaron, pero entre la Gran Gimnesia y la Gran Pitiusa no fue así ya que permaneció un canal marino de más de 70 km, infranqueable por la fauna terrestre. La menor medida de la Gran Gimnesia (2.000 km²) y un clima más árido provocó la extinción de la fauna terrestre y la falta de vegetales arbóreos notables.


Flora

En el pasado, Gimnesias y Pitiusas tuvieron ecosistemas distintos. Las Gimnesias tenían bosques de encinas en el interior y en los llanos costeros grandes bosques de boj balear (buxus balearica), planta que aún se puede encontrar de forma residual en Mallorca. Las Pitiusas estaban prácticamente desnudas de vegetación arbórea y predominaban las hierbas nitrófilas producto del efecto de las deyecciones de la gran cantidad de colonias de aves que tenían.

Fauna

En el pasado, la fauna de las Gimnesias y de las Pitiusas era muy distinta. Parece ser que, a excepción de las especies voladoras (aves, murciélagos e insectos voladores) no compartían casi ninguna especie terrestre: diferentes comunidades vegetales, diferentes herbívoros, diferentes carnívoros.
SUS PARQUES

ONU: ¿una bomba de tiempo contra el derecho marítimo?

En un año, más de cincuenta países podrán extender jurisdicción sobre aguas y lechos submarinos. Esto amenaza, entre otros, al visionario tratado antártico (1960), retrotrae las cosas varios siglos y provocará litigios interminables.Cuando, a mediados de 2007, Rusia reivindicó soberanía sobre el océano ártico, polo norte inclusive, la reacción más inteligente provino de Peter McKay, canciller canadiense. “No estamos en el siglo XVI, un –sostuvo- país no puede ir por el mundo reclamando cuanto se le ocurra”. Pero, amén de los rusos, doce gobiernos acaban de hacerlo y unos treinta de aprestan a seguirlos.
Esta vanguardia incluye Rusia, Brasil, Australia, Gran Bretaña, Irlanda (juntos), Francia, España, Noruega, México, Barbados, Sudáfrica y China. Otros tres (Argentina, Chile, Nueva Zelanda) mantienen –como noruegos, franceses e ingleses- antiguas reclamaciones sobre aguas y tierras antárticas. En rigor, los triángulos reclamados por Buenos Aires, Londres y Santiago se sobreponen en la región occidental que, al parecer, no forma parte del continente oriental.
En la fase actual, las pretensiones no se centran tanto en pesca cuanto en hidrocarburos y minerales bajo el casquete de hielo o las aguas circundantes. En un error típico de Naciones Unidas y su burocracia, hoy manejada por el surcoreano Ban Ki-mun, se ha fijado el 13 de mayo de 2009 como fecha límite para presentar reclamaciones marítimas. Cincuenta de los 155 ratificantes de la convención sobre derechos marítimos (CDM) están dispuestos a hacerlo. Entre ellos, meros islotes desperdigados por Oceanía y el Caribe.
El tratado sostiene, con gran latitud y escaso seso, que todo “país” –así sea una manchita en el mapa- tiene derecho a una zona económica exclusiva (ZEE) hasta 200 millas marinas (370 kilómetros) de su costa. La cifra 370 remite al primer intento histórico de dividir el mundo: en 1494, el tratado de Tordesillas fijaba un meridiano, a 370 leguas marinas del archipiélago de Cabo Verde, como límite entre los eventuales imperios español y portugués.
El punto más peligros de la CDM reside en que sus firmantes podrán estirar hasta 650 kilómetros sus ZEE entre la ratificación y los diez años subsiguientes. Pero, claro, esos cincuenta “fundadores” estarán en condiciones de hacerlo justamente en 2009. A diferencia de aquellos imperios europeos creados en los siglos XVI a XIX (sólo subsiste el ruso, vaya ironía), los móviles actuales son puramente geoeconómicos. La propia ONU calcula en alrededor de US$ 1 billones el valor de los recursos submarinos en danza.
Los reclamos ya presentados cubren unos dos millones de kilómetros cuadrado de lechos más allá de las plataformas epicontinentales. Salvo la argentina, que es anómalamente ancha y llega a las Malvinas, el resto implica mares más o menos cerrados (Mediterráneo-Negro, Caribe, Ártico, Índico, China meridional, Norte, Báltico).

Presión ciudadana en defensa de la naturaleza

El director ejecutivo de Greenpeace España, Juan López de Uralde, instó hoy a acrecentar la presión de la opinión pública en defensa del medio natural frente a las 'excusas recurrentes' de empresarios y gobiernos para mantener industrias como las que exterminan ballenas.

Animales cuya situación, protegida por normas esquivadas por países como Japón, ejemplifica, al entender de Uralde, 'lo que está pasando con el planeta en general, cómo, al final, los intereses económicos son los que guían la acción de las empresas, que, finalmente, termina con la naturaleza'.'Y cómo los gobiernos son incapaces, porque no tienen voluntad ni la suficiente convicción, de frenar el deterioro ambiental que estamos sufriendo', apostilló el directivo de Greenpeace, que habló esta tarde en Las Palmas de Gran Canaria de 'La defensa de las criaturas marinas', dentro de la segunda jornada del I Encuentro Internacional sobre Derechos de los Animales.Juan López de Uralde explicó que quiso vertebrar su intervención en torno a 'la lucha en defensa de las ballenas, porque -argumentó-me parece que, un poco, simboliza la lucha en defensa del medio marino'.Ello pese a matizar que, 'desde luego, los frentes por la defensa de las criaturas marinas son mucho más amplios que la defensa de las ballenas', al abarcar también la protección del litoral, la denuncia de la esquilmación de los recursos pesqueros o la lucha contra la contaminación.Y es que -dijo- 'de alguna manera, hay una cierta identificación entre la evolución de la situación de las ballenas y la del medio ambiente en el mundo'.'Hemos visto cómo, por un lado, partimos de una situación de caza devastadora, de intereses puros de la industria, en el año 86 se consigue la moratoria, pero, luego, algunos países interesados en continuar con la caza van royendo, con distintas excusas, esa moratoria por puros intereses económicos, en concreto Japón', prosiguió.Además, rechazó las justificaciones de quienes, desde empresas y gobiernos, aluden a la defensa del empleo para justificar la continuidad de cazas como las de ballenas o focas.'El tema del empleo es, simplemente, una excusa -sentenció-, porque también se puede generar empleo asociado, precisamente, a lo contrario, a la preservación de las especies naturales, y en eso también las ballenas son un ejemplo', al ser explotadas como atracción turística sin causarles daños.Por ello, en éste como en otros frentes de defensa de la naturaleza, 'una vez más, depende de la opinión pública, y de la capacidad que tengamos de evitar que, en este caso, un grupo muy pequeño de países, liderado por Japón, sean capaces de reírse de la legalidad internacional, de saltarse a la torera el consenso de la mayor parte del mundo en favor de estas criaturas', afirmó.

Parques naturales Asturias

Asturias se encuentra situada en la costa septentrional de España. Limita al oeste con la provincia de Lugo (Galicia), al este con Cantabria, al sur con la provincia de León (Castilla y León) y al norte con el Mar Cantábrico.
Tras la muerte del rey Don Pelayo (hacia el año 737), el territorio asturiano abarcaba desde el río Eo al río Asón.
En la mayoría de los mapas cartográficos hechos desde el siglo XVI se ve una Asturias dividida en dos: Las Asturias de Oviedo y las Asturias de Santillana. Las de Oviedo tenían su frontera occidental en el río Eo y por la parte oriental en el concejo de Ribadesella, donde comenzaban las de Santillana. Esta llegaba poco hasta más allá de Santander, situándose su frontera oriental en el río Asón. Por el sur las Asturias limitaban con la Cordillera Cantábrica.
En el mapa cartográfico editado en 1700 por Charles Hubert (primer geógrafo del rey de España) empieza a nombrarse Principado de Asturias, estando dividido aún en la de Oviedo y la de Santillana. En el año 1778 las Asturias de Santillana se integran definitivamente en la Provincia de los Nueve Valles de Cantabria.
El contorno actual se establece en la división territorial de 1833, que divide España en provincias a imitación de la francesa. Comprende los territorios de la comarca histórica de las Asturias de Oviedo, retornando los concejos de Ribadedeva, Peñamellera Alta y Peñamellera Baja que pertenecían a las Asturias de Santillana ahora en la Provincia de Cantabria.


Reserva de la biosfera


En 1970 la UNESCO inició el proyecto "el hombre y la biosfera", que tenía como objetivo conciliar la mentalidad y el uso de los recursos naturales, esbozando el concepto actual de desarrollo sostenible. Como parte de ese proyecto se seleccionarían áreas geográficas representativas de los diferentes hábitats del planeta, abarcarcando tanto ecosistemas terrestres como marítimos. Esas áreas se conocen como reservas de la biosfera.
Estas reservas de la biosfera están reconocidas internacionalmente, aunque permanecen bajo la soberanía de sus respectivos países, y no están cubiertas ni protegidas por ningún tratado internacional. Se seleccionan por su interés científico, basándose en una serie de criterios que determinan si un espacio se incluye en el programa.
La función principal de estos espacios es obviamente la conservación y protección de la biodiversidad. Sin embargo, también se persigue el desarrollo económico y humano de estas zonas, así como la investigación, la educación y el intercambio de información entre las diferentes reservas, que forman una red mundial
En el año 2006, existen 507 reservas de la biosfera en 102 países diferentes.



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ARAGON



La orografía de la comunidad tiene como eje central el valle del Ebro (alturas entre 150 y 300 metros aprox.) el cual transita entre dos somontanos, el pirenaico y el ibérico, preámbulos de dos grandes formaciones montañosas, el Pirineo al norte y el Sistema Ibérico al sur.

El Pirineo aragonés cuenta con las principales alturas de esta cordillera que separa Francia y España. Destacan el Aneto (3.404 msnm), Posets (3371 msnm), Monte Perdido (3,355 msnm), Perdiguero (3,221 msnm), Cotiella (2,912 msnm), entre otros. Los principales valles pirenaicos, formados por los ríos que ahí nacen, son Ansó (río Veral), Hecho (río Aragón Subordán), Canfranc (río Aragón), Tena (río Gállego) y Broto-Ainsa-Benasque (ríos Ara, Cinca y Ésera). Es precisamente por encima de estos valles donde se sitúa el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Entre el somontano y el pirineo se levantan un conjunto de sierras que forman el llamado prepirineo, que alcanza una altura máxima de 2,077 msnm (Sierra de Guara). Destacan por su belleza los Mallos de Riglos, cerca de la localidad de Ayerbe.
El tramo aragonés del Sistema Ibérico es un conjunto de sierras sin unidad estructural clara, que puede dividirse en dos zonas: sistema Ibérico del Jalón, donde destaca el Moncayo con 2,313 msnm, y el Sistema Ibérico Turolense, donde se hallan sierras como la de Albarracín o la serranía del Maestrazgo, esta última de gran complejidad orográfica.


Clima y vegetación


Aunque el clima de Aragón puede considerarse, en general, como continental moderado, su irregular orografía hace que se creen varios climas o microclimas a lo largo y ancho de toda la comunidad. Desde la alta montaña, con hielos perpetuos (glaciares), hasta zonas desérticas como los Monegros pasando por el clima continental intenso de la zona de Teruel-Daroca. Las temperaturas medias son muy dependientes de la altura. En el valle del Ebro los inviernos son relativamente poco rigurosos (aunque la sensación térmica disminuya mucho con el fuerte viento) y las temperaturas en verano pueden alcanzar los 40 °C. En las zonas de montaña los inviernos son más largos y las temperaturas medias pueden ser hasta 10 °C más bajas que en el valle. Dos son los vientos más importantes de Aragón: el cierzo o norte y el de levante o bochorno. El primero es un viento que recorre el valle del Ebro de noroeste a sureste y que puede presentar gran fuerza y velocidad. El segundo es un viento cálido, más irregular y suave procedente del sur-este.
La vegetación sigue las oscilaciones del relieve y del clima. Hay una gran variedad, ya sea vegetación silvestre o cultivos humanos. En las zonas altas se pueden encontrar bosques, matorrales y prados mientras que las zonas del valle del Ebro están siendo explotadas para uso agrícola.

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Encuentran organismos vivos a 1.600 metros bajo el fondo marino

Los científicos los llaman «extremófilos». Son organismos que, en efecto, se han adaptado a vivir en condiciones realmente extremas, muy diferentes de las que soportan la inmensa mayoría de los seres que comparten con nosotros el Planeta.
Bajo centenares de metros de hielo en los polos, en las fosas abisales de los océanos, en los cráteres de volcanes activos o incluso en el interior de sólidas rocas, la vida encuentra la manera de perpetuarse. A menudo sin luz, sin aire, sin agua, sin alimentos. O soportando igual tremendas presiones que temperaturas gélidas o tórridas, o ambientes ácidos o hipersalinos que matarían en cuestión de minutos a cualquier otro ser viviente.
Los extremófilos son el mejor ejemplo de que la vida, con mayúsculas, es capaz de prosperar en los lugares más inesperados. Incluso, por qué no, fuera de nuestro propio mundo.
Ahora, un grupo de científicos franceses, encabezados por Erwan Roussel, de la Universidad de Bretagne Occidentale, acaba de dar una vuelta más de tuerca a la cuestión al descubrir organismos vivos y reproduciéndose activamente a 1.626 metros de profundidad bajo el fondo del Atlántico Norte. Es decir, con más de un kilómetro y medio de roca por encima y varios cientos de metros más de agua. Es el hallazgo de vida a más profundidad jamás realizado hasta ahora. El anterior récord estaba en sedimentos extraídos de fondos marinos a «sólo» 842 metros de profundidad.
Hasta 111 millones de años
En un artículo que hoy publica «Science», los investigadores explican que realizaron el hallazgo analizando muestras de perforaciones efectuadas durante prospecciones petrolíferas. A esa profundidad, a una temperatura entre 60 y 100 grados centígrados, todo un ecosistema de células procariotas (que no tienen núcleo bien definido) prospera sin oxígeno y sin haber visto jamás la luz del sol. La antigüedad del sedimento, entre 46 y 111 millones de años, da idea del tiempo que esta clase de organismos lleva viviendo en esas condiciones.
Los investigadores están convencidos de que esta clase de ecosistemas submarinos a grandes profundidades pueden dar cuenta de hasta dos tercios de la biomasa total de procariotas que existe en el mundo. El entorno en el que viven estos organismos muestra altas concentraciones de metano e hidrocarburos. Tras analizar el ADN celular, los científicos encontraron secuencias similares a las que poseen otros organismos que viven a altas temperaturas (llamados por ello termófilos) y concluyeron, además, que esos procariotas eran Archaea, las bacterias que se cree dieron origen a la vida en la Tierra hace casi cuatro mil millones de años. Los investigadores consideran ahora buscar a profundidades aún mayores.

El Humano ha modificado los ritmos vitales en el mundo

Más de 30000 sistemas físicos, animales y vegetales de todo el mundo han modificado su comportamiento, producto del cambio climático.

El mundo ya no es el mismo, no solamente por la sociedad que hoy en día se está construyendo sino, también, por los cambios que la naturaleza va experimentando producto del calentamiento global, del cual somos responsables los humanos.

Árboles y plantas que pierden sus hojas antes de tiempo, especies que se trasladan a latitudes más altas, cambios en la migración de las aves y el desplazamiento de plancton y de peces hacia aguas más cálidas.Esos son algunos de los efectos del cambio climático, una realidad que provocaría, sin duda, grandes modificaciones a nivel mundial.

Un fenómeno que ha sido estudiado desde 1970 por diversos centros científicos de todo el mundo.Han investigado más de 30000 sistemas físicos, animales y vegetales.Un fenómeno que ha sido investigado por millares de especialistas, los cuales han llegado a conclusiones similares.Al hacer una comparación, cuestión que realizó la revista Nature, permite comprender el problema en su real dimensión.

Los glaciares retroceden, el permafrost se derrite y los ríos tienen crecidas primaverales tempranas.

El florecimiento se adelanta y surgen cambios en la maduración de los frutales.Por ejemplo, el ginko florece antes en Japón, al igual que los manzanos en España.Esto en un futuro cercano podría modificar nuestro comportamiento alimenticio, pues las temporadas de cada alimento aumentarán o disminuirán.

Las aves en el viejo continente cambiaron sus rutas de migración -situación que el humano en un futuro podría enfrentar- y en Australia remontan el vuelo antes de tiempo.Los salmones, por su parte, en Nueva Inglaterra, esto es en Estados Unidos, migran antes a desovar.

Los efectos, asimismo, se expresan en el agua. El placton, importante fuente de alimentación para la vida marina, ha disminuido en aguas cálidas y ha aumentado en aguas frías.En la península Antártica, en tanto, la población de pinguinos se ha reducido a la mitad.

Algunos de los centros de investigación que aportaron sus datos fueron la Nasa y la Universidad de Columbia, en Estados Unidos.Todos culpan a los humanos por estos cambios y con razón lo hacen .